PODER ENERGÉTICO DE LAS PIEDRAS PRECIOSAS Y DEL ORO
Las joyas pueden aportar un efecto espiritual a nuestra personalidad e incluso a nuestro organismo. Como ha marcado la historia de muchas civilizaciones, las joyas se mostraban como un símbolo del poder y estatus social de las personas, mientras que en otras culturas se usaban como protección contra energías negativas y males de ojo…
Cuando observamos un catálogo de joyas, la variedad de diseños, formas y modelos es sorprendente. A menudo basamos nuestra elección de joyas en la estética, pero desde una perspectiva espiritual hay otros factores que podemos tener en cuenta.
Oro es el metal más preciado del mundo.
Está claro que es fuente de riquezas y de poder. Entre sus muchos efectos se cree que puede producir mucha energía calórica, a causa de su color dorado, la cual genera un tipo de vibraciones muy tranquilizantes provocando la relajación del cuerpo. Esta fuente de calor se pensaba que podía ayudar a la recuperación de lesiones de manera más rápida.
Llevar un anillo de oro emana fuerza a la pareja, es como la conciencia Divina. Se cree que el anillo en el dedo anular reduce significativamente cualquier tipo de energía negativa, impidiendo que nadie pueda romper el lazo que une a la pareja enamorada.
Los pendientes no sólo están concebidos para fines decorativos o para simplemente embellecernos. Este ornamento se cree que ejerce un gran efecto de acupuntura en el organismo.
En la antigua China, se creía que ponerse pendientes aportaba diversos beneficios para la salud y de hecho los creaban para tal fin. Poco a poco se popularizó este ritual y la realidad se convirtió en leyenda.
Usar pendientes nos puede aportar un Principio Divino. Mucho habría que hablar con respecto a este tema. La energía que ejercen los pendientes en las orejas nos podrían aportarán felicidad, paciencia, alegría, deseo espiritual, habilidad para el perdón y perseverancia.
Los collares o colgantes son una tendencia popular de moda durante muchos siglos. Actualmente es uno de los elementos que pueden aportarnos un look más sofisticado. Pero no sabemos verdaderamente lo que esta joya puede aportarnos a nivel espiritual. Se cree que llevar un collar atrae inconscientemente la “Conciencia Divina”, que es a su vez transmitida a través de todo el cuerpo. Esta “conciencia” nos protegería de la energía negativa. También por ello existe la creencia de que hay colgantes que dan suerte o aportan cierta protección a la persona. Se dice que llevar una cadena de oro puro aporta bienestar, protección, confianza y suerte.
Otros ejemplos:
Ópalo: impulsa la creatividad y ayuda a mejorar la autoestima. Está considerado un elemento protector, capaz de eliminar las energías negativas. Por ello, se convierte en un buen aliado para potenciar las ganas de vivir.
Labradorita: potencia el lado espiritual al alinear el cuerpo físico y el sutil, lo que estimula la intuición, pero además elimina miedos y antiguas inseguridades. La compañía de este mineral calma la mente y facilita la introspección, lo que permite recuperar la fe en el yo y en el cosmos.
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